ANTONIO ROMOLEROUX «HIJA DE LILIT»

Antonio Romoleroux (Quito, 1968), ha creado una serie de dibujos de desnudo de quien él considera que es una de las hijas de Lilith, personaje mitológico, que representa a las mujeres que están dispuestas a romper cadenas y vivir según sus propias convicciones y principios.

Romoleroux, premio Mariano Aguilera -1995-, ha ganado diversos premios en certámenes de grabado y ha expuesto, a más de en el país, en Inglaterra, Estados Unidos, Alemania, Chile, Italia, Suiza, Francia, Canadá, Brasil y España. Entre sus proyectos más reconocidos están El Yo es Espíritu, sobre temas amazónicos; y Spondylus, Reciprocidad Ética, basado en el significado estético de esta concha, conjugado con bronce y papel de abacá.

La leyenda de Lilith
Parecería que la figura de Lilith tiene origen en Mesopotamia y también hay referencias de ella en el folclor judío. Según la leyenda, fue la primera esposa de Adán, a quien voluntariamente abandonó para ir a instalarse en el Mar Rojo. “Pensaba que era igual a su marido, que tenía los mismos derechos que él, porque habían sido creados con el mismo barro. No se sentía inferior, ni débil, ni dependiente. Era un mujer íntegra, y como tal quería gozar.”
A partir de ahí, se la encuentra en la literatura convertida en bruja, amante de diablos y súcubos, raptora de niños… pero siempre hermosa y autodeterminada.

La hija de Lilith
La imagen de una mujer capaz de escoger su propio destino ha motivado que se la tome como ícono de reivindicación y activismo; y que a su alrededor se generen una serie de estudios e investigaciones sobre la mujer y su permanente lucha por ejercer sus derechos en un mundo abrumaduramente patriarcal. Carmen Posada y Sophi Courgeron, Erika Bornay o María del Carmen Piqueras Soria han escrito sobre estas descendientes de Lilith.

Sigrid Rodríguez C.

Antonio Romoleroux, Quito 1968.
Ha realizado 26 exposiciones individuales y más de 70 colectivas en Ecuador, Inglaterra, Estados Unidos, Brasil, Alemania, Chile, Suiza, Italia, España y Canadá.
Recibió las distinciones: Artista invitado, Queens Museum of Art 2010, Nueva York, Estados Unidos; Mención de Honor, V Bienal Internacional de Pintura, 1996, Cuenca; Premio Único de Pintura Mariano Aguilera, 1995, Quito; Primer Premio, Salón Nacional de Pintura, Ministerio de Educación y Cultura, 1991, Quito; Mención de Honor en los Concursos Nacionales de Grabado, 1990, 1989, 1988, 1987, Municipio de Quito.
Fue invitado a las Bienales: Impress 13 International Printmaking Festival 2013, Stroud, Inglaterra; V Bienal Internacional de Pintura 1996, Cuenca, Ecuador; Troisième Triennale mondiale d’estampes 1994, Chamalières, Francia.